La depresión es cada vez más común en la población venezolana

Estudios afirman que una de cada seis personas sufrirá de depresión en algún momento de su vida. En Venezuela este trastorno es común en los trabajadores, por lo que se ha convertido en un problema de salud pública.

En el siguiente trabajo conozca como la depresión aumenta el riesgo de otras enfermedades y cómo podemos ayudar en caso de tener cerca a una persona deprimida.

A simple vista una persona puede mostrarse feliz, incluso puede tener solvencia económica, ser prospera, exitosa y estar rodeada de personas que las llenan de afecto, y aunque parezca ilógico, puede estar deprimida.

Según la psicóloga clínica Gisela Galeno, la necesidad de aislamiento, trastorno del sueño, inapetencia, o mucho apetito, son características de la depresión que deben evaluarse en conjunto.

“Se caracteriza primero por un estado de ánimo bastante bajo  y en su pensamiento siempre va a aparecer ciertas frases como: no puedo, es difícil, esto no me gusta, hay una pérdida importante por el placer de las actividades que normalmente venía haciendo las personas hay una sensación de vacío, la persona puede tener muchas ganas de llorar o quizás no, pero está el sentimiento de tristeza”.

“Todos podemos tener un episodio depresivo, una situación  de pérdida importante que nos va a llevar a un estado de ánimo importante que nos va a llevar a la tristeza, pero cuando hablamos de la depresión estamos hablando de un trastorno que puede tener una duración de al menos 6 a 8 semanas  y las consecuencias pueden generar interferencia en la vida cotidiana de la gente”, explicó Galeno.

Muchas de las personas que están deprimidas no saben que lo están otros deciden ocultarlo.

Según expertos esta patología, puede generar que las enfermedades prexistentes se desarrollen a mayor velocidad

“La depresión es un trastorno multifactorial porque tiene síntomas tanto cognitivos, como fisiológicos que puede precipitar el desarrollo de otras enfermedades, tales como el cáncer, el VIH, incluso de la diabetes tipo 2.”

“La misma dinámica social, la misma sociedad, que nos obliga a sentirnos competentes que somos activos, que somos mejores, tenemos que dar esa imagen de exitoso ante el otro y a veces tenemos que ocultar nuestros miedos, nuestras angustias y tristezas”, José Eduardo Rondón, Director postgrado psicología de la UCAB.

Rana García cuenta que ha sufrido de depresión, recuerda que la tristeza y el miedo formaron parte de esa época de su vida. A ella la ayudó volver a confiar en si misma. Y ella no es la única.

“Yo creo que es normal que en cualquier momento pasemos por etapa de depresión, por ejemplo al migrar o al regresar o a la  partida o muerte de alguien vas a pasar por eso, es un proceso. Para mí es como un camino de lágrimas que hay que superar”, Rana García, trabajadora independiente.

“El sentimiento es de no querer vivir, no querer avanzar, no querer respirar, no querer ni siquiera pararse de la cama”. “La superé con mi familia y con  la ayuda de una mascota, un gato, de verdad” Andrés Escalona, Estudiante de idiomas

Para otros llevar una vida espiritual y no dejarse atrapar por el ocio podría evitar la depresión.

“Practico la lectura, paseos al campo, al Parque del Este, voy a tertulias, a conferencia s y comparto con las amistades fundamentalmente y rezo, voy a misa, me encomiendo a dios y la virgen que me proteja de cualquier situación” Álvaro Silva

Los expertos recomiendan ser empáticos con las personas que padecen dicho trastorno pues tiene un carácter bioquímico que afecta los pensamientos y la conducta. Aconsejan un tratamiento combinando entre terapia psicológica y psiquiátrica.

No todo es tristeza, no subestime sus síntomas. En caso de alarma acuda al especialista. Recuerde que tener una buena salud metal es importante para tener una vida sana.

Nelsy Oviedo Corrales / Noticiero Venevisión