Conoce el peligro de consumir suplementos vitamínicos y del exceso de vitamina D

Los suplementos dietéticos son sustancias que se pueden utilizar para añadir nutrientes a la dieta o para reducir el riesgo de desarrollar problemas de salud, como osteoporosis o artritis. Están disponibles de muchas formas: cápsulas, polvos, líquidos o píldoras. A veces, los ingredientes de los suplementos dietéticos se agregan a los alimentos, incluso a las bebidas.

Son productos que se pueden comprar sin preinscripción médica, con las ventajas e inconvenientes que ello conlleva. A priori, comer una variedad de alimentos saludables es la mejor manera de obtener los nutrientes que necesitamos.

El peligro de consumir suplementos vitamínicos

Los suplementos multivitamínicos no pueden reemplazar la variedad de alimentos que son importantes para una dieta saludable. Los alimentos no sólo aportan vitaminas y minerales. Además, contienen fibras y otros ingredientes que podrían tener efectos positivos en la salud. Sin embargo, algunas personas no obtienen suficientes vitaminas y minerales de su dieta diaria, y sus médicos pueden recomendar un suplemento. Estos pueden proporcionar nutrientes que podrían faltar en su dieta diaria. Por eso, es importante el papel del facultativo.

Desde los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés), recomiendan consultar con el médico antes de tomar cualquier suplemento. Uno de los motivos, porque algunos suplementos pueden cambiar la forma en que los medicamentos que funciona.

Vitamina D: un nutriente esencial para los huesos

La vitamina D es un nutriente fundamental, porque ayuda a absorber el calcio, contribuye a prevenir la osteoporosis y es indispensable para que el sistema inmunitario pueda combatir las bacterias y los virus que lo atacan.

Este nutriente se puede tomar de varias maneras. Quizás una de la más conocidas sea a través del sol. El cuerpo produce vitamina D cuando la piel descubierta se expone al sol. La mayoría de las personas reciben al menos algo de vitamina D de esta forma. Otra opción es incluyendo en nuestra dieta alimentos como pescados grasos o cereales.

Consecuencias del exceso de vitamina D

También podemos ganar vitamina D en forma de suplemento dietético. Las dos formas de vitamina D disponibles en suplementos son D2 (ergocalciferol) y D3 (colecalciferol). Ambas aumentan la concentración de vitamina D en la sangre, aunque la D3 podría elevarla más y por más tiempo que la D2. Como la vitamina D es liposoluble, señalan los NIH, se absorbe mejor cuando se toma con una comida o una merienda que contenga algo de grasa.

Pero, como vienen apuntando estos especialistas, hay que tener cuidado con cualquier suplemento y su ingesta en exceso. En el caso de la vitamina D, las concentraciones demasiado elevadas en la sangre (superiores a 150 ng/mL) pueden causar náuseas, vómitos, debilidad muscular, confusión, dolor, pérdida del apetito, deshidratación, micción y sed excesivas y cálculos renales.

Además, los NIH advierten que las concentraciones sumamente elevadas de vitamina D pueden causar insuficiencia real o arritmias. 

Con información de: Vidae/Mundo Deportivo