Leones del Caracas venció a Cardenales y los bajó de la cima

Dos swings le bastaron a Leones del Caracas para batir a Cardenales de Lara 8 a 2 y de esa manera adueñarse de la punta de la tabla clasificatoria de la LVBP.

El poder de la ofensiva caraquista, esa que los tiene como los líderes absolutos del renglón en el circuito, se puso de manifiesto una vez más, gracias a los encendidos bates de Eugenio Suárez y de Oswaldo Arcia, que se combinaron para ser los artífices de siete de las ocho anotaciones del equipo en el encuentro.

Fue Suárez el primero de ellos en exhibir esa fuerza que lo ha caracterizado durante los últimos años y en el propio capítulo inicial sonó soberbio cuadrangular a mitad de gradas entre los jardines izquierdo y central, que encontró en circulación a sus compañeros Wilfredo Tovar y José Rondón, quienes se habían embasado por sendos imparables simples, frente a Néstor Molina, el abridor crepuscular.

La conexión de Suárez le brindó respaldo al iniciador melenudo Carlos Hernández, que en su segunda apertura de por vida en la LVBP, tuvo otro inicio titubeante al permitirle sencillo a Jermaine Palacios como primer cardenal que confrontó y luego llevar hasta la inicial a Gorkys Hernández, con cuatro envíos fuera de la zona de strike. El grandeliga de los Reales de Kansas City se complicó un poco más al incurrir en un balk para avanzar a los corredores y presenciar como Odúbel Herrera con elevado de sacrificio le causaría la primera abolladura.

Hernández mejoró ante los dos bateadores siguientes, a los que dominó con ponche cantado y ponche abanicando. Suspiros profundos se hicieron notar en el seno de la cueva felina. Pero el derecho se lio de nueva cuenta en el segundo apartado del juego, con otra base por bolas antes de recibir triple del novicio Javier Sanoja, para la segunda rayita cardenal, que acercó las acciones 3 a 2. Sacó los dos outs finales y así finalizó su actuación.

Por el lado de los larenses, si bien Néstor Molina empezó con esas fuertes turbulencias, con su experiencia y maña pudo solventar en el camino para sacar ceros en las próximas cuatro entradas, en las que retiró a 10 de 12 leones, de hecho, los dos únicos que llegaron a pisarle una almohadilla lo hicieron por una pifia de la defensiva y por un boleto.

Empero, el veterano escopetero no pudo sostenerse firme cuando salió para un sexto episodio de trabajo y el Caracas no desaprovechó la ocasión para agraviarlo. No solo a él, incluso a su reemplazante Pedro García.

Molina le admitió inatrapable a Harold Castro y doblete a Freddy Fermín. Suficiente para que el mandamás Carlos Mendoza decidiera removerlo del morrito y traer a García para intentar frenar la emboscada capitalina. No ocurrió así. El joven le lanzó cuatro envíos malos a José Rondón para llenar los cojines para luego incurrir en un wild pitch, que llevó a Castro a anotar la cuarta rayita del compromiso.

Con hombres en segunda y tercera sin outs, García también llevó hasta la primera a Eugenio Suárez por transferencia para que le llegara el turno a Oswaldo Arcia con el que se consagró como la gran figura de la jornada con Grand Slam. El fornido toletero descargó todo su poder hacía el graderío del centro para hacer estallar de emoción a todo el dugout, así como también a buena parte de los aficionados que se dieron cita para presenciar el sexto duelo de la serie particular ante Cardenales.

Antes del rally, específicamente en el quinto inning, los crepusculares habían amenazado con causar estragos ante el nicaragüense J. C. Ramírez, sustituto inmediato de Carlos Hernández en la planificación de José Alguacil. En ese lapso, el centroamericano llegó a tener los sacos repletos de larense, aunque solventó con un ponche importantísimo ante uno de los bateadores más peligrosos del torneo, como lo es Hernán Pérez.

Ramírez, que se recuperó de una molestia física sufrida en su previa actuación tras un pelotazo en su mano de lanzar, completó cuatro entradas de cuatro hits, un boleto y cuatro abanicados, guarismos que a la postre le valieron para hacerse con su segundo lauro de la contienda.

Los otros elementos del bullpen caraquista utilizados por el capataz Alguacil cumplieron de igual manera. Miguel Socolovich, Joshua Cornielly y Alfred Gutiérrez se encargaron de laborar el último tercio de juego sin aspavientos para asegurar de esa manera la vigesimoséptima victoria del torneo y tercera del año contra los barquisimetanos.

Prensa LVBP